martes, 18 de noviembre de 2008

Gestión del conocimiento.

“El objetivo de las buenas prácticas es aprovechar los conocimientos de las personas, el recoger las inquietudes e ideas de personas que desean encontrar soluciones a los retos y problemas que se les van planteando.”

El concepto de Gestión del Conocimiento esta vinculado con el poder de aprovechar todo el talento del personal de la institución, tomando en cuenta el gran valor que le confiere como capital intelectual y así poder depositarlo en algún soporte tecnológico para un uso posterior, para esta acción debemos tener en claro una series de conceptos vinculados al intercambio de conocimientos como las comunidades de practicas, las cuales hacen mención a una asociación multidisciplinar de personas que cultivan intereses comunes (o incluso pasión) por una temática claramente definida y en las que se desea aprender interaccionando de forma continua, generando conocimiento y aumentando capacidades, cabe destacar que este tipo de actividades permiten desarrollar conocimientos específicos a causa de aprendizajes basados en la practica; así las comunidades de practica se convierten en el espacio de confianza para resolver problemas, dar información discutir formas de pensar etc.
Algunas de las metas que se propone el realizar las comunidades de práctica son:

facilitar el intercambio de experiencias y generación de conocimiento
desarrollo de la memoria corporativa
facilitar el aprendizaje organizacional
consolidar áreas de conocimiento: saber que personaje esta informado de un tema en especifico y dónde se desarrollan algunos temas puntuales dentro de la organización.

Cuando se realizan los espacios de aprendizaje, donde se comparte experiencias y conocimientos sobre temas descritos, se desea profundizar en éstos para poder mejorar la propia practica, por lo tanto se busca sobre todo la acción (práctica), de manera que si se liberan fuerzas creativas y se llega a la innovación, el aprendizaje llega por añadidura.

Por ultimo la comunidad es una red social con una serie de valores adjuntos, ya que éstas se caracterizan por compartir inquietudes, objetivos o finalidad, un lenguaje común y las aportaciones de sus miembros. Para que tengan éxito necesita que sus miembros se identifiquen directamente con la misma sin asignaciones ni obligaciones (las Comunicaciones de practica sobreviven gracias a la motivación de sus integrantes), que los miembros perciban un equilibrio entre los aportes propios y los dicho por lo demás.

La estructura de una Comunidad de Práctica se concentra en tres niveles: el núcleo con una figura como moderador o experto que estimula las discusiones, mantiene el foco de la comunidad y media entre conflictos de los miembros, un primer círculo con los afiliados más activos o colaboradores y un segundo círculo con un conjunto de personas interesadas que pueden contribuir o no.



1 comentario:

Ainoa Córdova, Javiera Marzán, Catalina Yaryes, Ignacia Valenzuela dijo...

Este articulo fue un aporte de nuestro querido profesor !...gracias